Material: Los traperos pueden estar hechos de una variedad de materiales, incluyendo algodón, microfibra, poliéster y mezclas de fibras sintéticas. La elección del material depende del tipo de superficie que se va a limpiar y las preferencias del usuario.
Absorción: Los traperos están diseñados para absorber líquidos y suciedad de las superficies. Los materiales como la microfibra y el algodón son conocidos por su alta capacidad de absorción, lo que los hace efectivos para limpiar derrames y manchas.
Durabilidad: Los traperos están diseñados para ser duraderos y resistir el desgaste causado por el uso repetido y la exposición a productos químicos de limpieza. Los materiales de alta calidad y la construcción sólida contribuyen a su longevidad.
Facilidad de uso: Los traperos suelen ser livianos y fáciles de manejar, lo que facilita su uso durante largos períodos de limpieza. Las características ergonómicas, como mangos telescópicos y diseños de cabeza giratoria, pueden mejorar aún más la facilidad de uso.

Traperos

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